—¿Cómo y cuándo empezaste a escribir?

—A la edad de cinco años ya hace tiempo que jugaba videojuegos y sobre todo miraba películas. Una de ellas, Batman Regresa (mi favorita por aquel entonces) me inspiró a dibujar mi primer cómic, en donde Batman combatía contra el Pingüino. Tras eso, comencé a dibujar otros cómics infantiles y también a escribir cuentos. Unos años más tarde, con la ayuda de mi querida abuela, Élida Alamón, publiqué mi primer libro de cuentos infantiles, “El dragón bebé: Cuentos” con tan solo diez años. Desde entonces, nunca paré de escribir.  

—¿Qué géneros literarios escribes y por qué?

—Actualmente, escribo fantasía histórica, terror y ciencia ficción. De momento estoy inmerso en una pentalogía de fantasía histórica perteneciente a la serie “Una Historia de Lobos y Vampiros” en donde narro la antigua guerra entre licántropos y vampiros desde tiempos inmemoriales. El primer libro de esa saga es “El hombre encerrado: Cuentos de Juan Pretor”. Me siento en mi salsa con la fantasía histórica por dos motivos: el primero, porque me apasiona la historia y siempre quiero saber más, y el segundo, porque la fantasía es mi género favorito. Mi segundo género favorito es la ciencia ficción y me encuentro escribiendo tanto novelas como cuentos dentro del mismo. Por último, si bien no es mi género favorito, últimamente he escrito muchos cuentos de terror para distintas convocatorias y me encuentro dándole los toques finales a una antología de cuentos de terror y fantasía oscura que pienso publicar este mismo año.  

—Explica a los lectores qué van a encontrar en tu libro.

—Mi libro es una colección de cuentos de la espada y la hechicería que rinden homenaje a las antiguas historias del género iniciado hace más de un siglo por Robert E. Howard, tales como Conan el Bárbaro o Solomon Kane. En ella, el terror, el misterio y la aventura se conjugan en torno a un enigmático pero honrado caballero del siglo XII llamado Juan Pretor; nada menos que un cazador de vampiros. Mis lectores pueden esperar encontrar mucha acción, personajes inolvidables y momentos de mucho drama, pero también de alegría. Si les atraen las historias de héroes que luchan por salvar a la humanidad, pero con una vuelta de tuerca en el género, este libro les atrapará.

—¿Qué es lo que más te ha costado escribir durante tu proyección como escritor/a?

—Creo que lo que más me ha costado escribir son novelas. Por ello, cuando inicié la pentalogía que ahora me encuentro escribiendo, pensé que lo mejor sería que el primer libro fuera una colección de cuentos, sobre los cuales ya tenía una vasta experiencia. Tras haber publicado mi primer libro, haber escrito más de una docena de otros cuentos y encontrándome en proceso de terminar la segunda parte de la saga, esta vez en formato novela, me siento con mucha más confianza como para sumergirme en el mundo de las novelas.  

—Si tuvieras que elegir un personaje de tu creación. ¿Cuál elegirías?

—No tengo duda de que sería Juan Pretor. Es el personaje más enigmático y ambivalente que he creado. Es un ex monje guerrero que intenta huir de su pasado, solo para verse inmerso nuevamente en él. Mis lectores pueden esperar mucho de este personaje.  

—¿Quiénes son tus referentes literarios? ¿Crees que influyen en tu forma de escribir?

—Mi referente más grande en la fantasía es J.R.R. Tolkien. Sus libros, la Tierra Media y su forma de escribir me apasionan y sin duda han tenido una gran influencia sobre mi persona —quizás no tanto sobre mi forma de escribir. En cuanto a este último punto, me encuentro más influenciado por autores del género de la espada y la hechicería como Robert E. Howard o Andrzej Sapkowski. Por otra parte, también me siento influenciado por autores más recientes como Liliana Bodoc o Ildefonso Falcones, y más antiguos como Julio Verne o Alejandro Dumas.

—¿Cuál es el primer libro que recuerdas haber leído que te haya marcado y por qué?

—Miguel Strogoff de Julio Verne. Lo leí con tan solo doce años y fue un verdadero shock emocional para mí. No estaba preparado para ver tanta violencia en los años previos a la revolución de octubre de 1917 en Rusia. Otro libro que me marcó a fuego el espíritu fue El conde de Montecristo de Alejandro Dumas. Entendí que el hombre podía ser perverso si su historia de vida le daba motivos suficientes. Fue otro despertar muy potente y se convirtió en otro gran referente literario.    

—¿Tienes alguna anécdota curiosa del proceso de escribir para compartir con nosotros? ¿Cuál?

—Si bien pertenezco a ese grupo que piensa que uno debe tomarse el tiempo necesario para escribir una novela, en el 2021 escribí una novela para una convocatoria en menos de cuarenta días. Fue todo un hito para mí y me hizo ver que no hay por qué ponerse limitaciones a la hora de escribir.  

—¿Qué esperas de la publicación de tu obra con Ediciones Passer?

—Tengo muchas expectativas puestas en esta publicación. Creo que cuento con un gran apoyo y estoy dispuesto a dar lo mejor para llevar mi libro cada vez a más lectores. Le tengo mucho cariño a este libro y sé que en las manos correctas encontrará su público.  

—¿Estás trabajando en algún proyecto o tienes alguno nuevo en mente?

—Además de encontrarme escribiendo la segunda parte de la saga “Una Historia de Lobos y Vampiros”, titulada Las crónicas de Iván —que ya dobla en extensión al primer libro—, estoy trabajando en otras tres novelas y en una compilación de cuentos de terror y fantasía oscura, de nombre Antología Esquirlas de obsidiana rota. La misma tendrá no menos de 8 cuentos y alrededor de unas 150 páginas.