José Luis Cisneros

Nacido el 4 de Julio de 1969, en Madrid. Con gustos infinitos en todas las facetas de la vida es muy aficionado al arte en todas sus modalidades y tiene mucha curiosidad por todo lo que le rodea. Abierto de mente, apasionado y vital por momentos, pero tranquilo y familiar en general. Su lema es Vivir y dejar vivir. Poeta de sentimiento, con la prosa descarga la imaginación. Sin duda, su afición preferida es jugar con las palabras. Entre sus obras encontramos: Mis líneas, a ti; Diario de un presunto atleta; Entre aguas transparentes. Además, ha hecho varias colaboraciones en revistas, periódicos y en libros
de relatos y poesía

la Nix

Entre tus manos tienes un libro que nunca debería haber visto la luz. Porque la Nix es un local donde se refugian las leyendas, donde ha pasado de todo y donde el rock es imprescindible. Adéntrate en esta sala y disfruta de su lectura acompañado de la música que se escucha en este garito heavy.

Entrevista a José Luis

—¿Cómo y cuándo empezaste a escribir?

Hace tanto tiempo de mis primeras palabras en papel, que la TV se veía en blanco y negro. Y desde ahí, supe que me gustaba jugar con las palabras del diccionario. Bueno, en serio; si he de poner un hito en mi trayectoria como escritor, lo pondré a finales del 2010 ya que en ese momento, empecé los cimientos de mi primera novela. ¿Por qué en ese momento? Creo que por madurez mental.

—¿Qué géneros literarios escribes y por qué?

¡Uf! La verdad es que he probado muchos. Mi obra a día de hoy se podría considerar como ecléctica (tal y como soy yo), aunque aún me faltan por trabajar (ensayo, ciencia ficción, histórica, infantil, etc.). Voy a por ellas.

—Explica a los lectores qué van a encontrar en tus libros.

Como he dicho antes, desde mi primera novela que era de carácter más intimista, un viaje al interior buscando una salida, pasé al humor blanco al me dediqué en cuerpo y alma en mi segundo trabajo, pasando a un hermoso poemario, tanto en su contenido como en su continente, en mi tercera obra. En este cuarto trabajo, me he decantado por algo más «canalla» sin llegar todavía a la novela negra. Y en cuanto pase la marea de la Nix, me dedicaré de lleno a un libro infantil que ya tiene la estructura montada.

—¿Qué es lo que más te ha costado escribir durante tu proyección como escritor/a?

Lo que más me ha costado en este mundo de las letras es mostrar a los demás que sabía escribir, que tenía alma literaria, que era escritor. Y si tengo que decantarme por alguno de los estilos literarios en los que he trabajado, sin duda, el más difícil ha sido el de infantil. Saber qué decir a unas personas de edades tan tempranas, no es nada fácil.

 Tiene muy buena pinta, de verdad.

—Si tuvieras que elegir un personaje/poema/ escrito de tu creación. ¿Cuál elegirías?

Pues mira, es muy difícil la elección pero si he de hacerlo, me decanto por Búho. Protagonista de este, mi último trabajo, creo que me va a dar bastante juego en un futuro. Es una persona de barrio que trabaja como matón pero que quiere salir de ese ambiente… sí, creo que Búho es el preferido. Aunque con Honor me lo pasé de fábula…

—¿Quiénes son tus referentes literarios? ¿Crees que influyen en tu forma de escribir?

Mis referentes son, claramente, D. Francisco Gómez de Quevedo y D. Eduardo Mendoza. Dos escritores en los que no sólo destaco su clase sino el cambio de registro casi  en cada uno de sus trabajos. Obviamente no llegaré a la altura del hilo que toca el suelo de sus calcetines pero, ¿cómo no intentar llegar al empeine de esas prendas si me enamoré de esos sonetos y de esa narrativa en cuanto los leí?  


—¿Cuál es el primer libro que recuerdas haber leído que te haya marcado y por qué?

¡Oh! Sin duda El misterio de la cripta embrujada. Por la potencia del protagonista sin nombre y por hacerme ver que se puede escribir de maravilla y hacer reír.

—¿Tienes alguna anécdota curiosa como autor para compartir con nosotros? ¿Cuál?

Tengo varias. Las dos más emotivas vienen de dos personas mayores que leyeron mi primera novela. Una me dijo que fue la última novela que con esfuerzo sus cansados ojos habían leído y que recordaría sus palabras mientras su cabeza se lo permitiera. Me lo dijo llorando y lloré con ella. La otra señora me dijo que esa misma novela, le había devuelto a la vida. Me lo dijo llorando y lloré con ella. No creo que ese trabajo fuese tan vital pero que esas personas me confesaran eso, me dio muchos ánimos a seguir escribiendo. Otra anécdota preciosa para mí fue cuando fui a Gavilanes (Ávila) y me prepararon una presentación de mi segundo trabajo. Llegué al local vi cerca de cien sillas…, que mis paisanos llenaron. La mejor presentación de un libro que tendré jamás, sin duda.

—¿Qué esperas de esta publicación?

Pues según iba adelantando en la obra, no esperaba nada de ella. Pero según avanzaba, el ánimo fue creciendo hasta pensar en que, a pesar de ser un libro de bolsillo, una novela corta, puede tener mucho tirón. El hecho de ponerle banda sonora, de escuchar heavy metal mientras escribía, sin duda ayudó bastante. Así que espero que aquellos que la lean, disfruten un rato de sus líneas…

—¿Estás trabajando en algún proyecto o tienes alguno en mente?

Sí, como ya he dicho, lo siguiente será un libro infantil y si estoy a gusto con el resultado, antes de que acabe el año, lo publico.