Alicia Sarel

Nació un 4 de septiembre en la misma tierra por la que quinientos años antes cabalgó don Quijote, y desde siempre ha estado rodeada de libros y de fantasía. Empezó a escribir a los diez años tras leer La historia interminable, lo que hizo que su afición por las letras creciera y la acompañara a lo largo de toda su vida.

Las ideas sobre las aventuras de los Buscavidas comenzaron a formarse en su imaginación mientras acudía a las clases de la facultad de Magisterio y jugaba con sus amigos partidas de rol. Aunque sueña con escribir una gran saga de fantasía épica que pueda estar a la altura de sus lecturas favoritas, de momento admite que sus personajes se inclinan más por la picaresca, algo que confiesa no molestarle demasiado.

Actualmente, Alicia vive en Cartagena, donde distribuye su tiempo entre sus hijos, sus alumnos, sus gatos y sus libros.


El conjurador de sombras

No corren buenos tiempos para nadie, y mucho menos para Greven y sus amigos. Sin dinero y

sin perspectivas de conseguirlo, al menos de una forma honrada, están dispuestos a aceptar cualquier encargo. El encapuchado lo sabe, pero ¿por qué razón los ha contratado para viajar hasta el insulso pueblo de Larsen? Francamente, a ellos les da igual. Sin embargo, cuando las cosas no salgan como habían previsto y un personaje tan misterioso como el propio encapuchado se cruce en su camino, los amigos no tendrán más remedio que tomar partido en una aventura que comenzó mucho antes de que ellos entraran en juego. Mientras tanto, eso sí, hay que seguir buscando alguna forma de ganar dinero...

Súmate a este grupo de buscavidas. Acepta el encargo. Vive la aventura.

Entrevista a Alicia

—¿Cómo y cuándo decidiste escribir una novela de fantasía?

Esta novela en concreto empezó siendo el esbozo de la vida de una de sus protagonistas, Araliz, la curandera animista que era mi alter ego cuando jugaba con mis amigos a videojuegos y partidas de rol. Un día decidí escribir para ella una historia que resumiera su pasado y en la que, de manera anecdótica, se me ocurrió cruzarla en el camino de un grupo de aventureros. Ese pasaje en sí no iba a ocupar más de un párrafo, pero me encontré a mí misma preguntándome quiénes eran los componentes de esa pandilla y cómo habían llegado a ser lo que eran. El resultado fue que la vida de Araliz quedó para siempre unida a la de los Buscavidas. 

—¿Crees que los adolescentes son un público fácil o difícil al que dirigirse?

Creo que ningún grupo humano es homogéneo, así que tampoco lo serán los que decidan adentrarse en las páginas de mi novela. Pero de lo que sí estoy convencida’ es de que todos los lectores merecen respeto y que los autores nos dirijamos a ellos con propuestas de calidad. Así que no creo que haya grupos más fáciles o más difíciles, sino autores que saben llegar con sus palabras al alma de los lectores y otros que no. Ahí está la diferencia.

 

—Explica a los lectores qué van a encontrar en tu novela.

Sobre todo van a encontrar entretenimiento. Con esta novela he querido ofrecer una aventura que atrape, que divierta e intrigue a partes iguales. Tiene su dosis de misterio, su parte de acción, y sus pasajes de humor. ¿Qué más se puede pedir para pasar un buen rato? 

—¿Qué es lo que más te ha costado realizar de esta novela?

Para mí, una de las partes más difíciles de escribir han sido las escenas de lucha con armas de filo, porque cuando empecé a escribir apenas sabía nada sobre armamento, nunca había visto una alabarda ni había sujetado una espada para ser consciente de lo que puede llegar a pesar… Afortunadamente, mis amigos del grupo de esgrima histórico de Albacete me echaron una mano, y aprendí mucho sobre coreografía de batallas. Escribir esos pasajes ha sido todo un reto y estoy muy contenta con el resultado. 

—Si tuvieras que elegir una temática para tu libro, ¿cuál elegirías?

Creo que El conjurador de sombras trata, sobre todo, de la amistad; de cómo todos somos diferentes y actuamos de forma distinta, pero eso no es un impedimento para ser amigos. También trata sobre la lealtad a los propios principios y sobre las consecuencias que pueden acarrear las decisiones que tomamos pero, sobre todo, esta es una historia de amigos que se enfrentan juntos a los problemas de la vida. 

—¿Recuerdas la primera lectura que leíste o que te marcó en tu infancia?

De pequeña me fascinaba leer historias de fantasía, sobre todo si aparecía magia de por medio (algo que no ha cambiado con los años). También me encantaba leer relatos de misterio; de hecho, me recuerdo a mí misma sumergida en las tramas de Los Cinco, de Enid Blyton, con ocho o nueve años. Pero, sin duda, la novela que para mí marcó un antes y un después fue La historia interminable, de Michael Ende. Recuerdo que me la leí de un tirón en una tarde, y que cuando cerré el libro pensé «ya está, no se puede escribir nada mejor». Por entonces tenía diez años. Pero ese verano, mi prima mayor me comentó con una sonrisa algo que no se me ha olvidado todavía, y que aún le repito yo a algunos de mis alumnos cuando vienen a contarme los libros que han leído en vacaciones: «si te ha gustado La historia interminable, tienes que leerte El Señor de los Anillos». Para mí aquel fue el inicio de todo. 

—¿Tienes alguna anécdota curiosa de la creación para compartir con nosotros? ¿Cuál?

Pues, como cosa curiosa, os puedo contar que al principio yo solo conocía en profundidad al personaje de Araliz; el resto eran figurantes sin mucha importancia. Pero, mientras escribía sobre ella, había un personaje en concreto que tironeaba de mí continuamente, llamando mi atención y llenándome la imaginación de diálogos descontextualizados… un elfo de pelo blanco que quería su parte de protagonismo. Al final tuve que dársela, y con él al resto del grupo, que fueron contándome su vida sin que yo se lo pidiera… Soy una escritora muy organizada, me gusta esquematizar el contenido de cada capítulo antes de escribirlo y no salirme del guion que yo misma establezco. Imaginaos entonces lo que suponía para mí que Drakkan de vez en cuando tomara una ruta que no estaba planeada y se pusiera a hacer cosas que no venían a cuento. Había días en los que mis familiares o mis amigos me encontraban sentada mirando al vacío y, cuando me preguntaban “¿qué haces?”, yo les respondía “aquí estoy, discutiendo con Drakkan y compañía”, porque en mi cabeza todo eran voces hablando al mismo tiempo, decidiendo por dónde conducir la historia. 

—¿Qué esperas de esta novela?

Espero que los lectores, al sumergirse entre las páginas del libro, puedan sentirse parte de este grupo de buscavidas, y que al terminar la historia descubran que ellos también los conocen, que se han hecho amigos, y que están deseando volver a quedar juntos para vivir nuevas aventuras. 

—¿Estás trabajando en algún proyecto o tienes alguno en mente?

Hace poco terminé mi segunda novela, El pájaro tornasolado, que también está ambientada en un mundo de fantasía, pero que cambia totalmente la estructura al pasar de un protagonista grupal a una pareja. Ahora mismo estoy documentándome sobre la historia y la mitología de Japón para poder crear una novela que tenga un cierto sabor oriental, y también estoy esquematizando capítulos de una nueva aventura de Los buscavidas. No me aburro.